Algunos empezamos en Internet con velocidades de 14,4 Kbps o 28,8 Kbps. Otros tuvieron la suerte de iniciarse con el ADSL a velocidades que empezaron con 1 o 5 Mbps y que luego subieron hasta 20, 30 o 50 Mbps. La fibra óptica ha hecho posible tener Internet a velocidades de 100 Mbps, 600 Mbps y hasta 1 Gbps. Y lejos de estar obsoleta, ya se está trabajando en ofrecer velocidades de fibra de red de hasta 10 Gbps.
Gracias a las mejores y nuevas tecnologías que se están implementando en la red de fibra óptica actual, las velocidades actuales quedarán obsoletas y empezaremos a hablar de gigas por segundo en vez de megas por segundo. Velocidades que harán posible que todos puedan acceder a Internet en casa, realizar videollamadas, jugar online, ver contenido online y conectar toda suerte de dispositivos a la vez.
¿Qué hace posible tener fibra de red a velocidades de 10 Gbps? ¿Cuáles son las ventajas de tener conexiones tan rápidas en casa o en una oficina? ¿Qué usos podemos darle a estas redes para sacarles todo el partido posible?
¿Cómo funciona la fibra óptica?
La red de fibra de Movistar ofrece banda ancha de alta velocidad empleando una tecnología llamada FTTH. Es el acrónimo de fibra hasta el hogar, Fiber to the home en inglés. Lo que significa es que entre la central de Movistar y tu domicilio, la conexión se realiza empleando fibra óptica. A diferencia de otras versiones de la tecnología FTT en la que se combina fibra óptica y par de cobre. El resultado es contar con una red de telefonía e Internet de mayor velocidad y estabilidad.
En cuanto al funcionamiento de la red creada entre Movistar y sus usuarios, el estándar empleado en fibra óptica se conoce como GPON. Es el acrónimo en inglés de Red Óptica Pasiva con Capacidad de Gigabit. Este estándar permite conectar con varios clientes a velocidades superiores a 1 Gbps. Y de manera simétrica. Es decir, misma velocidad de subida que de bajada. Además, tiene otras ventajas, como un alcance de hasta 20 kilómetros, soporte para todo tipo de servicios como voz o Internet y otros aspectos más tecnológicos que no es necesario mencionar.
Para el usuario medio, contar con fibra FTTH que emplee GPON tiene varias ventajas. Por ejemplo, cada usuario tiene su propio ONT (Optical Node Terminal), terminación de red óptica. A partir de ahí, puede crear su propia red casera mediante Ethernet o WiFi y conectar todo tipo y cantidad de dispositivos como televisores, ordenadores, smartphones, aparatos y electrodomésticos inteligentes… En el caso de Movistar, tu Router Smart WiFi es a la vez ONT, router y punto de acceso WiFi. Un tres en uno para que no llenes tu casa de aparatos.
Subiendo a 10 Gbps
Con el estándar GPON, las redes de fibra óptica permiten ofrecer al usuario velocidades entre 100 Mbps y 1 Gbps. Con Movistar, en la actualidad puedes contratar 600 Mbps o 1 Gbps. Así pues, ¿cómo llegamos a los 10 Gbps? Aquí entra un nuevo estándar llamado XGS-PON. Al igual que GPON, es una evolución de un estándar anterior, PON, que traducimos como red óptica pasiva. El principal motivo para usar estándares PON es porque reducen los costes de implementación de estas redes. El proveedor de Internet instala la fibra óptica desde sus centrales y se diversifica la red hasta los hogares mediante splitters que hacen de intermediarios.
Pues bien. Del estándar PON pasamos al GPON. De éste al XGPON, acrónimo de 10 Gigabit PON. Es decir, aumenta las velocidades de la fibra de red. Y, finalmente, el siguiente estándar en la lista es XGSPON o symmetric XGPON, es decir, que permite crear redes de 10 Gbps simétricas. Esto significa que la velocidad es la misma tanto en subida como en bajada. El resultado de integrar XGSPON en la red FTTH de Movistar es que podrá ofrecer al usuario anchos de banda de 1 Gbps, 2 o 2’5 Gbps y, en el mejor de los casos, 10 Gbps. Esos 10 Gbps serán de subida y de bajada.
La red de fibra óptica seguirá siendo la misma. No hay que cambiar nada de la infraestructura física. El cambio es interno y tiene que ver con la luz láser que transporta los datos a través de la fibra. Eso sí. El usuario necesitará un dispositivo ONT compatible con el estándar XGSPON si quiere obtener el ancho de banda máximo. En caso contrario, seguirá recibiendo el máximo permito por el estándar anterior, 1 Gbps.
Las ventajas de una red a 10 Gbps
Claro está, podemos pensar que con los 600 Mbps que tenemos en casa nos bastamos. Lo mismo ocurre al comprar un automóvil, un teléfono inteligente o un ordenador. ¿Necesitamos tanta potencia o tanta velocidad?
Más velocidad nunca es malo. Al contrario. Contar con una conexión de fibra de red de 10 Gbps permitirá acceder a una Internet más rápida. ¿Qué ventajas tiene esto? Para empezar, acceder a más contenido en menos tiempo y sin perder calidad. Y con más dispositivos de manera simultánea.
Para el usuario doméstico, tener una red de 10 Gbps implica jugar online sin problemas con los servidores ni los otros jugadores. En concreto, la latencia es cuatro veces menor que con las redes de fibra óptica actuales. También permite consumir contenido por streaming a resoluciones 4K u 8K sin pérdida de calidad ni cortes. Videollamadas en Full HD o 4K, descarga de archivos, retransmisión de vídeo por Internet, conectar dispositivos inteligentes sin limitaciones, etc.
Para el usuario amateur y profesional, una red de 10 Gbps permite instalar tu propio servidor en casa. Tener una nube personal en la que guardar archivos y hacer copias de seguridad. También permite conectar infinidad de dispositivos sin perder ancho de banda. Por descontado, el teletrabajo se beneficia de este ancho de banda, ya que las velocidades disponibles están a la par con las ofrecidas para las empresas. Incluso podemos hablar de tecnologías como el cloud computing, la realidad virtual o el machine learning, que requieren de mucho ancho de banda para obtener los datos necesarios para funcionar.
En definitiva, la fibra óptica de 10 Gbps está a la vuelta de la esquina. Un nuevo salto cualitativo y cuantitativo que nos beneficia a todos y que nos permitirá disfrutar de la Internet actual y prepararnos para todo lo que está por llegar: juego online, realidad virtual, domótica e Internet de las cosas, hogares conectados, robótica asistencial, telemedicina y mucho más.